Mis años en secundaria.

Tras acabar sexto de primaria con risas por no tener que llevar más el uniforme y lágrimas por separarme de mi clase, pasé a la ESO. Al principio estaba un poco asustada, pero a la vez aliviada, porque no me separaron de mi grupito de amigas (y volvieron algunos amigos y amigas de infantil).

Me gustaba la extraña sensación de desorientación y la adrenalina que sentía cuando pensaba que ya no iba a primaria, que era "una mayor". Sin embargo, esta alegría fue disminuyendo conforme aumentaba el número de exámenes y de deberes. Aun así, yo estaba muy contenta con la clase y los profesores que tenía.

En segundo de la ESO, destacaré el viaje que hicimos a Madrid. Me lo pasé genial, sobre todo por la noche; todo eran risas.

3º de la ESO no ha sido un curso, que digamos, especial. Se me ha pasado demasiado rápido y no han pasado cosas que merezcan la pena nombrar. Pero bueno, todo muy bien, preparada para el año que viene, el último curso antes de Bachillerato. Solo deseo que sea tan especial, divertido y agradable como todos los demás, y que ocurran cosas que no pueda olvidar jamás.

Mis años en primaria.

Después de unos maravillosos años en infantil coloreando y aprendiendo a leer, tocó pasar a primaria. Aún no sabía los que me esperaba en los años posteriores, pero vamos, yo más feliz que una perdiz porque seguí en la misma clase que la mayoría de mis amigas (excepto Paloma, la marginaron y la dejaron solita con otra gente que no conocía de nada). 

En el primer ciclo, nos dio clase María José en primero y Valentín en segundo. De María José no tengo apenas recuerdos, pero de Valentín sí. Me reí mucho una vez que ató a un compañero a la silla con cinta aislante porque no paraba de moverse...

En tercero y cuarto, nuestro profe fue Javi. En estos años ya había que empezar a estudiar un poco, no mucho, pero un poco.

Quinto y sexto fueron los años que más me han gustado desde que estoy en el Narval. Conocía a mucha gente , y me hice más amiga de mis amigas. Lo mejor fue el viaje de estudios a Segovia, lo pasé de fábula.

 Pero cuando acabó primaria, no teníamos ni idea de lo que se nos venía acercando...

Y ahora las fotos, que sé que estáis deseando verlas.

Mis primeros años de infantil.

Recuerdo que empecé infantil en el Colegio Narval cuando tan solo tenía 3 años. Al principio, estaba un poco asustada y triste, porque no conocía a nadie y todos pasaban de mí... Pero muy pronto hice amigas que sigo conservando, y sigo queriéndolas como el primer día. 

 Hicimos excursiones a muchos sitios que no puedo recordar, pero seguro que fueron muy divertidas. También tengo muy buenos recuerdos de cuando era el cumple de alguien y nos daban coronas de cartulina, o de cuando nos emocionábamos por el simple hecho de jugar con la plastilina... 

Sin duda,  en ocasiones me gustaría mucho volver al pasado y volver a vivir esos maravillosos años. 

Aquí dejo algunas fotos de esta inolvidable época.